El vídeo es la punta del iceberg de una realidad creada sobre una injusticia social de base, que hace pobres y esclavos como resultado de una mala distribución de la riqueza.
La pobreza es la expresión descarnada del capitalismo, Saturno devorando a sus hijos para sobrevivir. En el Vaticano, algunos sermonearon desde el púlpito que hay que despolitizar la lucha contra la pobreza. Como si no fueran las políticas, su relación con el poder y la economía, las generadoras del cambio. No son las caridades ni las limosnas las garantes de las transformaciones sociales. Los mismos que denuncian el video de explotación infantil compran los zapatos o la ropa de marca cosida por manos menudas, fotografían secuencias sin ninguna protección al menor, contratan sus servicios como guías turísticos o alientan políticas que estrangulan un nuevo sistema de producción y distribución de los beneficios.
La contradicción a la carta y la tranquilidad de conciencia. Como diría Berlanga en Plácido: Ponga un pobre en su mesa y Dios en la de todos. La esclavitud de los padres y de los hijos, el secuestro de sus derechos y de sus vidas.
Hay que tenerlos de piedra y no de pétalo, para quedarse impasible con las medidas del Banco Mundial. Protector de los intereses de los grandes capitales, alza su voz contra la pobreza con estrategias asistenciales: Lo que doy por un lado me lo llevo con creces por otro.
Y otro documental sobre una injusticia, y en este caso contra los niños.
Casi es difícil acercarse al tema. Sólo enseñando a justo este grupo de niños de la India es injusto, observando cuantos niños en el mundo son abusados para trabajar en los trabajos más duros, en vez de vivir feliz, aprendiendo qué tesoro es la vida.
Pero con lo muy mal que cae el hecho de los niños trabajando. Qué sería la alternativa real de estos niños? Morir de hambre si no hacen lo que hacen? O ser pegados por sus padres porque no trabajan? Quien puede dar una mano para ayudar? Dinero no sirve para ayudar, porque como sabemos el dinero no llega donde tiene que llegar.
Menos mal, que nuestra santa iglesia siempre está ahí para ayudar con sus oraciones para que dios les ayude a los pobres.
Cuando veo estas imágenes se me gira el estomago y me vuelvo enfermo pensando que billones de euros son pagados cada año a la iglesia y nadie realmente sabe donde desaparece este dinero. La institución más ridícula que he visto en mi vida.
Iván, no puedo ir con frecuencia a tu Blog si quiero vivir unos años más sin sufrir un infarto cardíaco...
2 comentarios
Marina Khalo -
La pobreza es la expresión descarnada del capitalismo, Saturno devorando a sus hijos para sobrevivir. En el Vaticano, algunos sermonearon desde el púlpito que hay que despolitizar la lucha contra la pobreza. Como si no fueran las políticas, su relación con el poder y la economía, las generadoras del cambio. No son las caridades ni las limosnas las garantes de las transformaciones sociales.
Los mismos que denuncian el video de explotación infantil compran los zapatos o la ropa de marca cosida por manos menudas, fotografían secuencias sin ninguna protección al menor, contratan sus servicios como guías turísticos o alientan políticas que estrangulan un nuevo sistema de producción y distribución de los beneficios.
La contradicción a la carta y la tranquilidad de conciencia. Como diría Berlanga en Plácido: Ponga un pobre en su mesa y Dios en la de todos. La esclavitud de los padres y de los hijos, el secuestro de sus derechos y de sus vidas.
Hay que tenerlos de piedra y no de pétalo, para quedarse impasible con las medidas del Banco Mundial. Protector de los intereses de los grandes capitales, alza su voz contra la pobreza con estrategias asistenciales: Lo que doy por un lado me lo llevo con creces por otro.
Descorazonador.
Marcel -
Casi es difícil acercarse al tema. Sólo enseñando a justo este grupo de niños de la India es injusto, observando cuantos niños en el mundo son abusados para trabajar en los trabajos más duros, en vez de vivir feliz, aprendiendo qué tesoro es la vida.
Pero con lo muy mal que cae el hecho de los niños trabajando. Qué sería la alternativa real de estos niños? Morir de hambre si no hacen lo que hacen? O ser pegados por sus padres porque no trabajan? Quien puede dar una mano para ayudar? Dinero no sirve para ayudar, porque como sabemos el dinero no llega donde tiene que llegar.
Menos mal, que nuestra santa iglesia siempre está ahí para ayudar con sus oraciones para que dios les ayude a los pobres.
Cuando veo estas imágenes se me gira el estomago y me vuelvo enfermo pensando que billones de euros son pagados cada año a la iglesia y nadie realmente sabe donde desaparece este dinero. La institución más ridícula que he visto en mi vida.
Iván, no puedo ir con frecuencia a tu Blog si quiero vivir unos años más sin sufrir un infarto cardíaco...
Un abrazo,
Marcel