LA CORREA ROTA
Seguí tu manual, perseguí tus huellas, escuche tu voz, tu risa detrás del bosque. Me hundí con todos los botes y barcos que llevaban tu nombre.
Lloré todas las lágrimas que me atreví a portar conmigo. Las ventanas se golpean por el viento, el mar ruge, el sol abrasa, los animales salvajes se matan entre ellos dentro de mi corazón cada mañana. Las ramas de los árboles me descubren nuevos secretos mientras las aves coreografían nuevas despedidas.
¿La vida es dueño o es perro? Yo paseo con la correa rota, sin saberlo y practico la esquizofrenia comportándome como ambos. No se si estoy dormido o sigo despierto, si soy el negativo de una foto, el fotógrafo o el protagonista del encuadre. Desconozco cuantas veces he cambiado el plan antes de la última vez. He olvidado de quien o de que huía, he olvidado con quien es el reencuentro o si alguien me espera, he olvidado lo mas importante o quizás nunca tuve la menor idea. Pero no toméis muy en serio mis repentinas desapariciones, de pequeño quería ser "Superman" y ahora me veo sobrevolando mis miedos tan solo en algunos de los pocos sueños que recuerdo. Y lo cierto es que, durante el tiempo en que no permanezca completamente dormido, me conformaría con llegar a ser "El hombre invisible", para dejar de estar sin estarlo y tan solo susurraros desde la ausencia y con ilusión renovada los detalles de mi vida entera. Y es que, mientras la vida chirria, yo escribo a mi paso una bonita cancion sobre la que poder caminarla.
Iván Sáinz-Pardo
"La ira dormida" ©2009
2 comentarios
Elecciones -
un saludo.
Marina Khalo -
(Lametón y mutis por el foro)...