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EL ESCONDITE DE IVÁN

POST RESCATADO

EXAMEN DE AMOR (Rescatado)

EXAMEN DE AMOR (Rescatado)

Dicen que el amor es solo serotonina, dopamina y oxitocina, que tan solo es química. Dicen que el amor es solo un hábito, una tradición, que tan solo es historia. Dicen que el amor es casual, probabilidades y estadísticas, que tan solo son matemáticas. Dicen que el amor es poesía, verborrea romántica, que tan solo es literatura. Dicen que el amor es solo actividad hormonal, que tan solo es naturaleza. Dicen que el amor solo es circunstancial e interesado, que tan solo es geografía. Dicen que el amor es solo instinto animal, que tan solo es gimnasia.

Yo digo que el amor es guiñarte el ojo en clase de química. Mandarte notitas en la clase de historia. Enamorarnos en verano cuando me ayudas a estudiar para el examen de matemáticas de septiembre. Besarnos a escondidas en clase de literatura. Aguantar la risa y tocarnos por debajo de la mesa en las clases de naturaleza. Hacer planes juntos y soñar con el futuro en clases de geografía. Defenderte muy de cerca cuando jugamos al baloncesto en la clase de gimnasia.

Yo digo que el amor siempre es una asignatura pendiente, un examen aprobado, un examen suspendido, una clase para pirarse juntos y poder escondernos del mundo.

Iván Sáinz-Pardo
"La ira dormida" ©2007

PINCELADA (Rescatado)

PINCELADA (Rescatado)

Una vaca de madera atravesada por una servilleta de papel. Una casa de chocolate y gente de juguete. Candelabros, plantas por todas partes y cuadros robados del museo del terror… abnegación camuflada en paredes de diseño.
Tejados afilados como los niñatos que escuchan “Rave”. Madres atolondradas con pies de plomo y maridos con su cordón umbilical conectado a la cortadora de césped.
Críos que ya nacen con un casco fosforito soldado a la cabeza y una bicicleta bajo el culo. Señoras mayores con gafas, sombrero y bicicleta; bicicletas con señora mayor, sombrero y gafas; sombreros con gafas, bicicleta y señora mayor.
Hoy paseo bajo un cielo gris perenne, y me pregunto, antojadizo, si de verdad toda esta gente de rostros arrugados y sandalias con calcetines blancos fueron jóvenes alguna vez. A mi no me engañan, sé que siempre fueron así, infinitamente aletargados en el tiempo que no transcurre para ellos en Alemania.

Cerveza, cocodrilos, enanos insensatos y la ansiedad como un virus sin catalogar. Molinillos de viento en el jardín y alfombras repartidas por el suelo como islotes en un verdoso pantano. Lluvia de agua con gas, pan negro con mantequilla y una vaca que me mira siempre complaciente… una vaca de madera atravesada por una servilleta de papel

Iván Sáinz-Pardo
"El sendero de la oveja negra"
N 33042/1997
R.P.I: VA-1329

!EL CINE ESPAÑOL Y OLE! (Rescatado)

!EL CINE ESPAÑOL Y OLE! (Rescatado)

"En homenaje a la reciente decisión de la Prohibición de las corridas de toros en Cataluña"

El cine es cultura. El cine es un arte que recoge y aúna toda una serie de actividades artísticas y creativas en un proyecto común. Fotografía: El cine son 24 fotografías por segundo, revelado y laboratorio. Pintura: El cine vive del encuadre, de la composición de la luz y del gusto por la composición de los planos y de la perspectiva. Teatro: El cine requiere de dirección actoral, de interpretaciones, experiencia teatral y puesta en escena. Pero también de una dirección de arte, creación y recreación de decorados, lugares y ambientes. Así como de un vestuario, peluquería y maquillaje. La música y la radio: El cine necesita y se apoya en las composiciones musicales, los músicos, directores y orquestas y además incluye a los actores de doblaje, el sonido directo, la postproducción de sonido y efectos sonoros. La literatura: El cine necesita de los autores, las novelas, guionistas, guiones y adaptaciones. El cine necesita muchas veces dibujantes, domadores de animales, especialistas, historiadores, expertos en informática, en efectos especiales, en postproducción digital, etc. A poco que se analice la complejidad de su proceso, se descubre aún como un arte mucho más acaparador, abarcando muchos otros ámbitos creativos y artísticos en un único fin.

El cine ha servido en muchos momentos como medio de denuncia, como arma de libertad de expresión con las que un país expresa sus inquietudes culturales y artísticas, su realidad social. El cine refleja nuestra tradiciones, nuestra condición histórica, nuestra identidad universal. El cine es una ventana al mundo. El cine es entretenimiento, es arte, es historia y es cultura.

Si en España se realizan (tirando muy por lo alto) más o menos una media de 180 películas al año. Si cada película cuesta una media de 2 millones de Euros. Si cada película recibe, de nuevo haciendo una media por lo alto, del 50% de su presupuesto en subvenciones estatales. (El resto proviene de ventas de derechos televisivos, inversiones privadas y otros). Eso significa que todos los españoles pagamos de nuestros impuestos un total aproximado de 180 millones de Euros anuales para subvencionar nuestro cine.

A muchos les podrá parecer una barbaridad, quizás hasta injusto. Ahora continuemos:

Todos los españoles pagamos de nuestros impuestos un total de 564 millones de Euros anuales para subvencionar el toreo y las celebraciones taurinas.

Mi pregunta es la siguiente:

¿Qué es el toreo en comparación y para que nos sirve?

Clickea este link:

"EL TORO QUE LLORA"

Iván Sáinz-Pardo

VATICINIO NAZI (Rescatado)

VATICINIO NAZI (Rescatado)

"Los diarios de Nuremberg" recogieron una curiosa conversación entre Hermann Göring, destacado político y militar alemán, miembro y figura prominente del Partido Nazi, lugarteniente de Hitler y comandante supremo de la Luftwaffe, y el psicólogo G.M.Gilbert durante el proceso de los Juicios de Núremberg tras la II Guerra Mundial, en el que este fue juzgado por una infinidad de crímenes, entre ellos, "Crímenes contra la humanidad" y "conspiración de una guerra ofensiva".

Las palabras de Göring, escuchadas 61 años más tarde y con nuestra realidad social y política mundial actual, consiguen poner los pelos de punta. Juzguen ustedes mismos:

Göring:
-"Por supuesto, la gente no quiere guerra. ¿Por qué querría un pobre diablo en una granja arriesgar su vida en una guerra cuando lo mejor que puede conseguir es volver a su granja de una pieza? Naturalmente, la gente de a pie no quiere guerra; ni en Rusia ni en Inglaterra ni en América, ni por supuesto en Alemania. Eso se entiende. Pero, después de todo, son los líderes del país los que determinan la política y es siempre algo muy simple arrastrar al pueblo, tanto si es una democracia, o un régimen fascista, o un parlamento o una dictadura comunista."

Gilbert:
-"Hay una diferencia. En una democracia, la gente tiene algo que decir al respecto mediante sus representantes electos, y en los Estados Unidos sólo el Congreso puede declarar guerras."

Göring:
-"Oh, eso está todo muy bien, pero, con voz o no, el pueblo siempre puede ser arrastrados a los deseos de los líderes. Es fácil. Todo lo que tienes que decirles es que están siendo atacados, denunciar a los pacifistas por falta de patriotismo y poner al país en peligro. Funciona igual para todos los países."

Fuentes: Meneame.net, Wikipedia.

MI AMIGO ISRAEL (Rescatado)

MI AMIGO ISRAEL (Rescatado) En el mundo hay hombres buenos y hombres que no lo son.
La amistad verdadera se alimenta de una calidad humana muy especial y es un don, una virtud de la que únicamente pueden disfrutar estos primeros.

La amistad verdadera se reconoce al instante. Es más que un flechazo. Vive en nosotros de forma independiente. La amistad verdadera es un bien, una virtud, un lujo. Y por lo tanto no esta al alcance de todo el mundo. Pero a diferencia de otras muchas cosas en esta vida, la amistad verdadera no se puede comprar, alquilar, vender, prestar...

La amistad es algo imparable. La amistad es invencible cuando hay admiración mutua, respeto, generosidad, intuición, cuando se tiene fe y confianza en el otro, cuando es de verdad.
Y las amistades de verdad no se forjan, tampoco se hacen. Las amistades verdaderas nacen, suceden, ocurren.
Pero la amistad es también una oportunidad, una aventura. Un viaje. Es compartir nuestra mochila, muchas veces también nuestro espacio. Es ofrecer, entregar por placer, sin esperar nada concreto a cambio.
La amistad es como una bola de tenis, la compartimos, cada uno en nuestro lado. Va y viene, por que la amistad es un dar y recibir. La amistad es como una bola de tenis que cada vez nos encuentra en una posición distinta en la pista, por que la vida nos lleva de un lado a otro, a veces incluso nos vapulea. Y es seguir esforzándonos por estar ahí siempre esperandola en su sitio.

La amistad es una capacidad, la de poder seguir sorprendiendo cada vez. La capacidad de demostrar, ilusionar, motivar. La capacidad de dar un paso adelante, de saber estar ahí, de poder abrirse, de ayudar y aprender a compartir los momentos verdaderos.

La amistad es comunicación, espontaneidad, una palabra, un gesto. Es separarse, volver a encontrarse. Es sufrir cuando el otro sufre. Es compartir la misma sonrisa, la naturalidad de sentirse cerca a pesar de las distancias en el tiempo y en el espacio, y es poder volver a ser, sin esfuerzo, y cada una de las veces, uno mismo.

La amistad es ante todo amor. Por que en realidad las dos cosas son solo una misma.

Este post va dedicado este mes a uno de esos hombre buenos. Un amigo de verdad a quien quiero y admiro muchísimo y que además justo ahora comienza una nueva etapa en su vida. Desde este escondite, mi querido Israel, quiero recordarte lo orgulloso que me siento de ser tu amigo. Desde este rincón quiero aprovechar para felicitaros de nuevo a tí y a Carol por vuestra reciente boda, y desearos de corazón toda la suerte y toda la felicidad del mundo.

TODOS LOS NIÑOS ESTAN LOCOS (Rescatado)

TODOS LOS NIÑOS ESTAN LOCOS (Rescatado) Hoy me siento tan incierto como un acierto casual. Siento la soledad del adiós que golpea sin avisar, del escorpión rodeado, del maquinista esperando en la vía muerta. Escribo rodeado de cicatrices, de marcas perecederas. Sorbo el café, acompañado por las huellas de todas aquellas palabras necesarias que nunca nos dijimos.
La repetición que menos me gusta es la que suena siempre a algo nuevo. Esa que cuenta que la locura se cura con la edad. Que los adultos son como la tos enferma vaticinando el final.
Hoy me siento solo, pensando en los días que nos separan, en los días vacíos que ahora juegan a las cartas en el jardín. Que apuestan con esos otros días que ya se transformaron en inquilinos de nuestra casa y que nunca se cansan de perder.
Dormimos pegados, como dos niños dementes, criando plantas exóticas a oscuras, para alimentar todos los sueños que ya no recordamos. Y la luz infinita regresa cada mañana, cuando tú perdiste tus gafas de sol, a propósito, para que las encontrase cualquier otro. Y es que, un buen día, decidiste repartir tu suerte con desconocidos, tu espacio interior con muebles ajenos.
Sabes que nunca conseguirás alargar la noche lo suficiente. Al menos no tanto como para lograr apagar el sol para siempre. Tú caminas con los ojos cerrados y yo nací ciego. Todas las decisiones que no tomamos mientras duraba nuestra música, serán ahora una fotosíntesis eterna, una sintonía extraña, una mudanza al cielo, alargándose, implacable. Sin un esfuerzo verdadero, honesto, nuestra felicidad se encarnará en la sonrisa de un Dios en el que no creemos; en la sonrisa forzada de un Dios confirmado en su puesto, justo un momento antes, de su inevitable despido.

Iván Sáinz-Pardo
"La ira dormida" ©2006

Y PASEÉ EN MI LLANTO (Rescatado)

Y PASEÉ EN MI LLANTO (Rescatado) Y paseé en mi llanto, cuando el cielo estaba tristemente cubierto y las montañas parecían más verdes.

Y paseé en mi llanto, cuando subía la marea, aciaga y rotunda, cuando la brisa, transformada en huracán, arrojaba mil gotas de lluvia sobre mi cara.

Y paseé en mi llanto, con espuma y sal en mis labios, con el recuerdo dulce de los tuyos y el corazón de arrecifes desgarrado; y paseé sin importar el tiempo y sin tener a nadie a mi lado.

Y paseé a lo largo de la orilla, mientras en la arena se hundían mis pies descalzos; mientras mi camisa bailaba con el viento, empapada como mi alma, de mar, sal, lagrimas… y de dolor amargo.

Iván Sáinz-Pardo
"El sendero de la oveja negra"
N 33042/1997
R.P.I: VA-1329


AMARILLO IMPOSIBLE (Rescatado)

AMARILLO IMPOSIBLE (Rescatado) Amarillo, y hoy la tierra tiene miedo de nosotros y de nuestra brutal locura. La tierra nos teme. El aire esta lleno de almas. Almas descoloridas, pálidas, sin olor, ni tacto. El cielo está lleno de almas, lo sé. Tres mil almas al menos, flotando sobre el cielo estrellado de Afganistán.
Pasean las almas sus gemidos de alambre. Los hijos aniquilan a su madre, cegados por la dictadura de sus propias mentes asfixiadas y corruptas. La muerte febril se balancea, siempre inoportuna, porque nunca hay un buen momento para morir cuando sólo se conoce la vida. Morirse es como borrar el dibujo de nuestro nombre de un encerado. Sangre, fuego, agua y almas sobrevolando nuestras cabezas dibujadas con tiza.

Amarillo imposible. Hoy el aire está lleno de almas, almas como ratas sin esperanza, atrapadas en el fondo de una piscina vacía. Miles de hijos aplastados contra la tierra madre. Liberadas las almas de sus cuerpos y los sueños de sus realidades, sólo cabe esperar a que cada cosa vuelva a su lugar, sea éste cual sea.

Hoy el aire está lleno de almas, pululando en acechantes bailoteos y no sé si descenderán hacia nosotros, o si por el contrario, marcharán, titubeantes, por el agujero del ozono. Me estremezco al pensar en esos cuerpos sin vida. Tres mil o cuatro mil, ni más ni menos. Mil, dos mil, tres mil, cuatro mil, que sencillo es nombrarlo, enumerarlo.

¿Cómo serán mil cuerpos callados, inertes, desnudos de vida? ¿Cómo serán cuatro mil cuerpos desarticulados? ¿Cuatro mil madres muertas? ¿Cuatro mil padres sin aliento? ¿Cuatro mil niños sin alma?

Miles de almas golpean esta noche la ventana de mi cuarto y parece que ya nunca vaya a dejar de llover. Las almas son, sin duda alguna, más inteligentes y libres sin la dictadura orgánica de nuestras necesidades físicas, pero la vida, para bien o para mal, sólo se crea a partir del conjunto de las dos cosas. Mi cuerpo se enfría, la piel se transforma en marmol y el susurro incesante enmudece. Sin embargo, hay un eco que perdura en lo que aún soy y me recuerda, una y otra vez, que nuestras pobres almas no son mucho más que mera comida para peces en el jodido y deshabitado estanque de la vida.

Iván Sáinz-Pardo
"Al final del arco iris"
©-N333042/00


VIAJE POR MI CUARTO (Rescatado)

VIAJE POR MI CUARTO (Rescatado)

Viajo por mi cuarto en un coche conducido por alguien que no conozco. Mientras, por la ventanilla, desde el asiento de atrás, observo el transcurrir de los días.

-¿Donde estas?

Escucho el ruido del motor y me dejo llevar, consciente de que mi cuarto es un agujero negro que lo quiere engullir todo; ese todo que existe a mi alrededor y que se presenta como un cuerpo eternamente prostituido.
El conductor detiene el coche. Sin pronunciar una sola palabra, extrae unas alas falsas de plástico del portamaletas y desaparece volando.
Todo se ha detenido a mi alrededor. Yo permanezco allí atrás, sin moverme, en silencio.
Entonces salgo del coche y me siento en el asiento del conductor. Las llaves están puestas.
Desde el techo de mi cuarto, aleteando sin demasiada destreza, observo ahora como el coche arranca a trompicones cambiando de sentido y como se aleja hasta desaparecer.
Mi sonrisa abre la puerta de mi cuarto y por fin escapa al mundo exterior, como catapultada, serena e invencible.

Iván Sáinz-Pardo
"La ira dormida" ©2005

UNA HORA ANTES (Rescatado)

UNA HORA ANTES (Rescatado) Amanece una hora antes, pero yo seguiré durmiendo lo mismo para poder soñar contigo la jornada completa.
La soledad de mi cepillo de dientes me habla sobre todo lo que te echo de menos y recuerdo las veces que en la cama, a tu lado, sufría al pensar en tener que separarme de ti mientras dormíamos.
Añoro tus sanas manías en mi cuarto y los restos delatores de tu dulce compañía.
Se que te quiero, por que a tu lado todo es más sencillo y sonrío sin comando.
Se que te quiero, porque contigo como cómplice y como protagonista de esta historia de amor, soy feliz y mejor persona.
Ahora me cepillo los dientes y le sonrió al espejo, ningun cambio horario podrá impedir que, como cada noche desde hace ya cuatro años, sigamos citándonos en secreto en cada uno de nuestros sueños.

Iván Sáinz-Pardo
"La ira dormida" ©2005

UN FRANCOTIRADOR EN BERLÍN (Rescatado)

UN FRANCOTIRADOR EN BERLÍN (Rescatado) Berlín, te estoy apuntando con mi mirilla y yo se que me miras pero no me ves.

Hace frío cemento, los invasores nacen, crecen, se reproducen y mueren, pero la mirada flagelada de los ángeles de oro y las avenidas imposibles permanecen.
Berlín es una bomba sin explotar, oxidada, pintarrajeada, rodeada de curiosos. Mi corazón es una casita de muñecas de alterne en la que vive atrincherado un francotirador.
Primero nací prematuro y ahora la muerte se toma su tiempo. Yo, mientras, termino con todos mis sueños en pequeñas raciones, pensando en que la vida es un tren con demasiadas paradas por visitar como para continuar encerrado en este jodido retrete, escondiéndome por si viniera el revisor.

Berlín, te estoy apuntando con mi mirilla y yo se que me miras, pero no me ves.

Iván Sáinz-Pardo
"La ira dormida" ©2007

SUPERMAN RETURNS (Rescatado)

SUPERMAN RETURNS (Rescatado)

¿Dónde estabas Superman?
Te hemos echado de menos. Por aquí, contarte que durante tu ausencia, tanto norteamericanos como israelitas han continuado llevando el terror a medio mundo, han seguido atentando, saqueando, e invadiendo países. África aún se muere de violencia, SIDA y hambre. Los gobiernos de todo el planeta se corrompen a base de dinero negro y comisiones. Las multinacionales dominan el mundo, los derechos humanos siguen escritos únicamente en papel del Water y tenemos a los animales en peligro de extinción, torturados o esclavizados. Aún reina la hambruna, el egoísmo, la contaminación, el materialismo… seguimos cargándonos el planeta entero… En cada uno de nosotros continua habiendo un superhéroe y un supervillano.
Entiendo que te fueras hace veinte años, pero no comprendo como te has decidido a volver y como no es que huyes volando muy lejos de este infecto lugar. De lejos, parece un planeta azul, tranquilo, pacífico, pero únicamente es una falsa apariencia.
Ponerte ese traje es sin duda de una responsabilidad insufrible, y sabemos que ni siquiera sabes por donde empezar.
Nunca te recriminaremos nada de nada, si decidieras volver a huir, o ponerte un bañador y unas chancletas, para pasar desapercibido entre los humanos. ¿Sabes?, no te lo echaremos nunca en cara. Nadie nunca te diría nada si, ahora, decidieras olvidarte de todo para, como el resto de nosotros, dedicarte únicamente a engullir absurdas conversaciones de ascensor, estúpidas sobremesas de ocio, aftersun y paellas de chiringuito. Para mirar, con la tripa llena, con el corazón aturdido, tranquilamente y como si nada hacia otro lado.

Ivan Sainz-Pardo

COCO (Rescatado)

COCO (Rescatado)

Bellísimas formas se apoderan de mí esta noche, cuando el silencio es fértil y poderoso. Cuando el silencio habla por los dos, cuando tú te muestras tan linda y yo te añoro aún antes de tus ausencias.
Invencibles los temblores de la pasión inesperada y el descubrimiento, cuando la noche graba nuestros nombres en sus mensajes estelares y nos premia con sus fragancias absolutas. Y el mar está aquí con nosotros, abrazado a la brisa que lo mece y le da vida, lamiéndonos de espuma y sal los pies descalzos.
La luna le susurra al mar un cuento, y tú y yo mi amor, somos los protagonistas. Porque nuestro pasado y nuestro futuro son la carne que nos ciega y nos acorrala, devorando a dentelladas nuestro presente, nuestros nombres, nuestra cordura.

Bellísimas formas se postraron ante mí y algo me detuvo. Algo parecido al miedo a pensar que quizá todo fue demasiado sencillo. Quisiera haberte tenido conmigo mucho antes. Quisiera no haber arruinado mi alma tan temprano. El viento ahora no nos susurraría amargos e injustos alegatos sobre nuestra infelicidad, y tú me preguntas:

-¿Sobrevivirás al infinito de mis lágrimas?

Y yo te besaré entonces, para devorarte como se devoran los animales, en silencio, ausentes de racionalismo y falsa poesía.
Nuestra verdad no nos pertenece. Nuestra verdad vive tan lejos de nosotros como lo hacen la tierra del cielo. Nuestra mentira no nos pertenece. Nuestra mentira son centímetros de carne entrelazada. Nuestros labios curtidos por el mar se buscan a ciegas. Yo me pregunto si eres mía, y tú, mientras, sólo puedes mirar hacia dentro, porque tu alma es un balcón con patio interior y muchas vecinas para espiar.

Cierra tus ojos y siente el escalofrío de caer lentamente. Te hará llorar. Llorarás, llorarás sin motivos. Llorarás sin saber muy bien porqué, y tu piel y mi piel, serán la piel de un mismo Dios. Siéntete música, canción de cuna, porque en realidad únicamente somos notas y acordes de la vida.

Bellísimas formas nos descalifican y nos restan arrogancia.
Sé que la luna es el ombligo de la noche y los lunares las estrellas de tu vientre hinchado. Porque, ¿sabes?, sólo deseo hundirme en tu vientre, acercarme a él y abrazarme a su miedo, a su inocencia, a esa fragilidad que nos une y nos separa.
No quiero discutir más contigo, malvender y ridiculizar más nuestros secretos. No sé quién nos enseñó a conspirar contra nosotros mismos, a traicionar nuestras promesas e ilusiones. Quiero cerrar los ojos y aprender a vivir de nuevo, y quiero que sea a tu lado y al de nuestro hijo.

Bellísimas formas se nos escapan, como la arena entre los dedos de un gigante, y nuestras carencias nos fatigan. No entiendo cómo pude hacer de ti, mi amor, mi enemiga.
No dormirá la noche si su cuento le llena de espantos, no dormirá la noche sin eternidad ni pactos. Pactemos pues una tregua, bebamos de nuestras grietas, construyamos juntos un templo de esperanza que nos enseñe el camino del no enfrentamiento.
Quizá nuestro amor nunca llegue a ser perfecto o infinito, como tampoco lo es el mar, acotado por orillas y montañas. Quizá tu vientre tierra, tu vientre agua, tu vientre fuego, tu vientre amor, recoja todo lo que el tiempo nos ha permitido reunir en la comunión de nuestras solitarias almas. Nada es fácil para ti, nada es fácil para mí, pero lo nuestro no puede morir si en el fondo nos amamos como lo hacemos. Unas pocas semanas más y nuestra ansiedad se consumirá por sí sola. Unos cuantos días más y nuestros ojos permitirán que nos volvamos a ver como antes.

Bellísimas formas y un nuevo pretexto para amarte, porque en realidad es lo único que deseo hacer. Porque la vida no entiende de estrategias anónimas, todas son personales y con nombres propios. Todas ellas son válidas cuando la misión principal es la felicidad.

Aquí junto al mar, mi amor, sellemos una tregua que nos permita respirar, no quiero vagabundear más en nuestro fracaso. Y tu me preguntas qué es lo que pienso, y yo guardo silencio y te beso despacio, mientras siento que estos instantes que nos rodean, esta noche, este mar y esta brisa atemporal, con su complicidad, nos han devuelto la visibilidad en el camino hacia la ternura y también una especie de esperanzadora plenitud.
Y tú me preguntas qué es lo que pienso, y yo únicamente consigo pensar en mi amor verdadero hacia ti y hacia nuestro hijo, mientras te observo tan preñada y tan hermosa, y al oído, te susurro:

-Mi amor, volvamos a casa.

Iván Sáinz-Pardo
"Al final del arco iris"
©-N333042/00


CEMENTERIO DE ELEFANTES (Rescatado)

CEMENTERIO DE ELEFANTES (Rescatado)

He emprendido el regreso, hurgando en la noche, como un salvaje enloquecido, acechando, robándole momentos extraños al alba.
Camino solo, cansado, entre las ruinas de tus labios, persiguiendo el gemido de nuestras almas dispersas, desahuciadas, a la deriva. Tus ojos fueron siempre como ventanas en el desierto de mis días más secos.
Todo sucedió demasiado deprisa.
Lo que nos une nos divide, para transformamos en meros daños colaterales de una guerra que nunca nos fue ajena del todo.
Busco un alivio milagroso con sabor a días felices para esta herida abierta. Trato de seguir nuestras pisadas, recuperar todo lo andado. Atravieso los restos de nuestra propia civilización, extinguida. Presencio con horror el genocidio de nuestra complicidad, nuestras palabras de amor convertidas en trémulos cadáveres. Los huesos blanquecinos de aquella antigua magia.
He llegado. Es la ley de marfil. Tan solo queda esperar, eternamente.

Iván Sáinz-Pardo
"La ira dormida" ©2006

SILUETAS (Rescatado)

SILUETAS (Rescatado) Flores marchitas nacen de mis lágrimas.
Demasiados días sin sol.
Entre la bruma se siluetean los árboles desnudos.
He lanzado, uno a uno, todos mis sueños en tu busca. Pero sigo aquí solo, recostado sobre las hojas muertas.
He perdido ya tu voz, casi tu rostro.
No quiero olvidar tu olor.
En esta ciénaga lucho contra el olvido.
Cierro los ojos y nos recuerdo juntos, derrochando nuestros besos.
Y como yo te miraba mientras tu dormías a mi lado.
Estoy dispuesto a inventarme todas las razones para esperarte.
El silencio es absoluto.
Los pájaros han emigrado. Contigo.

Iván Sáinz-Pardo
"La ira dormida" ©2005

LA BICICLETA NARANJA (Rescatado)

LA BICICLETA NARANJA (Rescatado)

A veces, mi suerte parece torcida.
Recuerdo que una vez tuve una bicicleta naranja. Su manillar también había nacido torcido, así que rodaba siempre en direcciones tan torcidas e inesperadas como mi vida.
Los niños no lloran, decía el abuelo, pero yo necesitaba llorar bastante a menudo.
Antes todo era diferente, mi bicicleta naranja era la más rápida del mundo. Yo pedaleaba deprisa, muy deprisa, buscando y burlando la velocidad. Mi bicicleta naranja era como un regalo divino y montado en ella, yo me sentía invencible y valiente como un héroe con superpoderes al que las caídas no le dolían.
Ahora ya no soy un niño, no lloro casi nunca y tampoco tengo ya mi bicicleta naranja. Sigo adelante y, a pesar de los moratones acumulados de todas las caídas, sigo siendo feliz. Ahora vivo como un héroe retirado y sin superpoderes. La vida, poco a poco se endereza, pero lo cierto es que ahora, aunque hay menos curvas, la velocidad de algunas cosas sí que consigue asustarme.

Iván Sáinz-Pardo
"El sendero de la oveja negra"
N 33042/1997
R.P.I: VA-1329


EL MUNDO EN MINIATURA (Rescatado)

EL MUNDO EN MINIATURA (Rescatado)

Imaginaros reducir la población mundial proporcionalmente hasta 100 personas. Las estadísticas y las cifras con las que estamos acostumbrados a vivir, se muestran mucho más reveladoras.
Este post, por poner un ejemplo, si lo leyera absolutamente todo aquel que en el mundo puede acceder a una conexión de Internet, sería leído tan solo por 3 de los 100 habitantes de este planeta. Cuando llegan los datos sociales y económicos, el documento se vuelve sencillamente escalofriante.

EL ÚLTIMO TREN (Rescatado)

EL ÚLTIMO TREN (Rescatado)

Los martillos de la noche se sacuden la soledad y la cordura flagelada por los años, allá afuera, en la ciudad que hoy se vistió de alas por nosotros. Paralizados en su vía oxidada y mugrienta, tus sueños hablan de una ciudad distinta, con otra gente distinta, pero el único tren con un destino semejante al que tu deseas, arranca sin tí en estos precisos instantes.

"Olvídalo, que se vaya a la mierda, déjalo escapar, ven y sígueme."

Siente ese cosquilleo en tu pecho, ese ahogo de ser un semidiós sin aire que respirar. No hay palabras, no hay eternidad, escucha muy atentamente:

"Hoy ha nacido un lenguaje interior. Estás muerto, como todos y cada uno de nosotros, y ahora, yo soy el jodido dueño de todas las mentiras que tú estás dispuesto a creer."

Iván Sáinz-Pardo
"Al final del arco iris"
©-N333042/00

!RIE, MONO TONTO! (Rescatado)

!RIE, MONO TONTO! (Rescatado)

Animales torturados cruelmente y exterminados en experimentos y en absurdas dinámicas y tradiciones, al servicio de una sociedad humana esclavista y aterradora que mira, felizmente, hacia otro lado. Animales criados en tortura eterna para nuestro consumo. Cinturones y zapatos, cosméticos, huevos, leche, pieles, carne, pescado, ocio, granjas, fábricas, perreras, mataderos, corridas de toros y yo, avergonzado por participar activamente en esta maquinaria atroz, no sé ni por donde empezar, o quizá no me atreva. Complaciente, cobarde, suscribo en silencio nuestro propio credo, ese nazismo disfrazado de civilización moderna que nos empuja a creer que el hombre es el único animal del planeta capaz y a la vez, con derecho a reír.

Iván Sáinz-Pardo

MI ELFA (Rescatado)

MI ELFA (Rescatado)

Con el descanso interrumpido abro los ojos a la presencia que me visita y titubea, al duende de los sueños paralelos, a mi ninfa deseada, la de sedosas alas multicolores de papel cebolla.
Ella va y viene por las horas nocturnas, me visita siempre con la intención de regalarme complicidad, murmullos íntimos y pequeños secretos.
Sus pies son alargados y retorcidos, juguetean siempre en mil posturas, en mil posiciones imposibles y extrañas. Su rostro juega siempre a despistar con continuas gesticulaciones, dislocadas y grotescas, escondiendo siempre la bendición y el aleluya de una pequeña diosa. Ella abre mucho sus ojos y la boca. Mueve en un tic sus orejas puntiagudas, para de pronto, cambiar a una expresión fría y seria. Continúa con un guiño, me lanza un beso y, cruzando los ojos, termina por burlarse de mí del todo sacándome la lengua. Después, en su boca se desborda una sonrisa exagerada.
Ella pronuncia mi nombre con su voz inaudible. No puede hablar, quizá tampoco sepa, pero su cuerpo no deja de expresarse sin parar. Me cuenta viejas historias, sagradas leyendas, fábulas increíbles, trabalenguas para sordos y refranes olvidados.
Muchas veces se expresa nerviosa y sin sentido, entre mímica, gestos y bailes. De pié cruza las piernas, con su cara apuntando al cielo. Se estira, aprieta los puños y llora con todas sus fuerzas, parece invocarse al poder de la noche y las estrellas.
Yo también le hablo en bajito y le cuento mis cosas. Otras veces, únicamente nos observamos en silencio y ella permanece conmigo, sonriente, suspendida a metro y medio del suelo.
Yo a veces intento convencerla de que haga una vida normal, pretendo que entre en razón, hacerla entender que la vida no es solo jugar y volar inquieta de un sitio para otro. Mi elfa inclina su cabeza, agita lentamente sus alas, se aproxima a mí y me acaricia la cara como a un niño; abre bien sus ojos verdes como prestándome mucha atención, y por unos momentos, permanece tumbada en mi cama, a mi lado, tranquila.
Es entonces cuando suele relajarse un poco, cuando puedo aprovechar para observarla mejor. Ella acerca su carita y me mira muy de cerca, derrochando dulzura, con esos ojos verdes infinitos que me mantienen sedado y dócil en cada una de sus tiernas intenciones. Su rostro es de una belleza distinta, sus facciones son de una perfección diferente; sus formas son finas y alargadas, sus extremidades puntas de estrella… La comisura de sus finos labios, la suavidad de su piel aceitunada, su tez pecosa y su nariz chata y respingona. Toda su belleza, toda su perfección, se encuentra más allá, lejos de lo que conocemos, como si ciertamente no fuese fruto de una creación humana.

Muchas veces, ella advierte en mi esa pasión incierta, entonces me sonríe con ojos pícaros, como prometiéndome. Pero vuelve a escaparse de mí y sus labios vuelven a dar forma a un beso que ella manda desde lejos al aire y yo recojo; después se sonroja y se da la vuelta, juguetea con sus alas y se esconde tras ellas. Al plegarlas y recogerse, puedo observar su vestidito, transparencias de colores pálidos, formas de mujer semiocultas en seda suave.
Yo la incito a volver a mí y ella se protege entre sus alas, recelosa y sugerente, inadvertida de que con su ingenua postura, ha hecho subir un poco su faldita descubriendo parcialmente el dibujo y la tierna desnudez de sus nalguitas redondeadas.
Al percatarse, me sonríe abiertamente y se escapa volando entre círculos y piruetas, atraviesa la ventana abierta de mi cuarto y huye, como un meteorito a la deriva, como estrella fugaz para el rabillo de mis ojos.
Sin embargo, otras veces, cuando la miro en silencio, en ardiente deseo, cuando ruego, excitado, ella toma las formas que yo más deseo y sus senos crean nuevas formas solo con la intención de mi mirada, toman tamaño al tacto de mis pensamientos. Cierra sus ojos y yo la transformo, la creo y la destruyo, la enriquezco con mis fantasías, la amo de verdad, en silencio. Su cabello es una llama de vivos colores, ardiendo a mi gusto. Voy dando forma a sus caderas y a su cuello. Con cada una de mis intenciones alargo sus muslos, la atraigo hacia mí y beso la humedad de su vientre templado. Mi elfa sonríe, suda con su cuerpo cambiante, disfruta y se estremece en un éxtasis compartido.

Pero hay otras veces en que la noche se abre y nos invita a pasear bajo su herida. Entonces nos escapamos por la ventana y ella me lleva a los bosques. Yo allí la hablo de esa soledad que no escogemos y que nos hace más fuertes, de la naturaleza contradictoria de los sentimientos humanos; hablo sin parar, sabiendo que, a pesar de sus visitas, a pesar de sus ausencias, de sus juegos, disimulos y piruetas, ella siempre escucha y disfruta con mi presencia.
Paseamos en la noche, mientras se transforma en hoja otoñal o en gato de pelo negro y erizado que salta por los tejados; ahora es una niña que recoge flores de colores y poco después, se transforma en una anciana de paso aletargado para contar estrellas. Mi elfa es un lobo solitario, aullándole a la luna o es rana verde para croar en saltitos estúpidos y divertidos. Es brisa inesperada, meciendo mi cabello y al instante, gota de lluvia para caer a mi paso desde la rama de un árbol y recorrer mi frente.
Sus transformaciones y mis palabras se funden como almas gemelas, como polos distintos atrayéndose sin remedio. Como palabras escapadas de un libro, en busca de las imágenes que describen su alma de tinta y papel.
Pero cada mañana, sin embargo, vuelve la pesadumbre de un nuevo día sin ella, el retorno a una vida real. Cada amanecer, mi elfa desaparece como si fuera para siempre, y yo, no la espero. No la espero porque solo estoy convencido de que volverá, cuando en mitad de la noche, un suave susurro me despierta.

Iván Sáinz-Pardo
"El sendero de la oveja negra"
N 33042/1997
R.P.I: VA-1329